Hugo Midón, Objetos maravillosos y Locos ReCuerdos



Hugo Midón, siempre vigente

En el teatro La Comedia, se estrenó una versión de “ObLa obra Objetos maravillosos, de la dupla Hugo Midón-Carlos Gianni, se presenta en una nueva versión, dirigida por Gabi Goldberg , con la participación del grupo Vocal 5. Junto con el estreno, se inauguró la muestra “Mundo Midón” (ver Una muestra para recordar), en la que se puede ver un recorrido por la vida y obra del director, actor y autor fallecido en marzo de 2011.

Estrenada en 2001 bajo la dirección del propio Midón, Objetos maravillosos es una apuesta interesante de lo que el dramaturgo consideraba “una batalla desigual entre el teatro y la televisión, porque en el teatro se llega a un público más reducido”. En un mundo cada vez más dominado por la tecnología, este musical hace hincapié en el valor de las cosas comunes, que están ahí, al alcance de la mano, como tesoros por descubrir.

Objetos cotidianos que se transforman, mediante la imaginación, en maravillosos cepillos de dientes, teléfonos, mates, bombillas, valijas y pinceles: el centro de un universo de canciones, juegos y bailes. La llegada del Profesor Bald -inventor del balde- al Club de los Objetos Maravillosos y los preparativos que se hacen para recibirlo son las excusas para desplegar un notable abanico de canciones y géneros musicales: desde tango y jazz, pasando por una referencia a Estela Raval y los cinco latinos, hasta ritmos caribeños, magistralmente logrados por el grupo Vocal 5, integrado por Raúl Oliveira, Mariela Gianico, Alfredo Allende, Roberto Peloni y Sergio Alem.

La dirección de Goldberg logra rescatar el espíritu disparatado y festivo de las obras de Midón y consigue un resultado tan preciso como el de una partitura.La puesta está planteada de manera elemental, con una escenografía atractiva en lo visual, plagada de objetos comunes (justamente por eso, maravillosos).

Dentro de esta especie de coreografía general que parece ser toda la obra -se cantan y bailan unas diez canciones- el humor, siempre el humor, es fundamental. Ese humor inteligente, para todas las edades, característico de las obras de Midón: juegos de palabras a partir de la deformación de alguna de ellas, respuestas corales, dobles intenciones, malentendidos, “sanatas” graciosísimas, como la del presidente del Club de los Objetos Maravillosos ante la inminente llegada del Profesor Bald, al mejor estilo Daniel Rabinovich de Les Luthiers. Durante el desarrollo del espectáculo se siente -en el más amplio sentido de esta palabra- el espíritu de la creación de Midón: el valor de las cosas sencillas pero esenciales, -como él las definía- que están relacionadas con lo cotidiano. Algo que es su sello característico y que seguirá estando presente, mientras se sigan representando sus obras.jetos maravillosos”. Además, “Locos ReCuerdos” vuelve al Cervantes.

Fuente: Clarín

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