Maruja Bustamante: La leyenda de Lis Chi


"Quiero que la gente vaya al teatro"

La directora llevó a escena una historia de animé y amor que se construye en cinco espectáculos para la familia.

Las revistas que siempre estaban en el baño de la casa de la actriz, directora y dramaturga Maruja Bustamante inspiraron su última aventura teatral La leyenda de Lis Chi, un megaproyecto que incluye cinco obras que se irán estrenando de a una por mes, hasta fin de año. Ejemplares de historietas como “El Tony” y personajes como Pepe Sánchez, un agente secreto canchero e inútil a la vez, la animaron a llevar al teatro el universo de los superhéroes y la estética de los videojuegos.
La Leyenda de Lis Chi se presenta como una gran epopeya nacional sobre el fin de los tiempos, con artes marciales, archienemigos, superhéroes y la peor vendetta jamás imaginada: la épica aventura de un superhéroe cuyo único error fue enamorarse. El personaje principal de esta propuesta teatral es Aaron Lifschitz, un niño muy alegre que no se quejaba de nada ni nadie. A los once años sus padres, que tenían una tienda de telas en Once, quebraron y cambiaron a Aaron a una escuela pública y laica. Allí, pasó a ser el nene de nombre raro y apellido difícil. Su Lifschitz se convirtió en Lis Chi a manos de una hermosa niña rubia llamada Úrsula Patricia López, de quien se enamoró. Pero los padres de Aaron prohibieron la relación por motivos religiosos. A partir de entonces, la niña pergeñó un plan: dominar el mundo para cambiar sus reglas y destruir a Lis Chi.
"Empecé a escribir estas obras en el curso de dramaturgia de la EMAD. Surgieron un montón de personajes y me di cuenta que tenía que escribir varias obras, hasta que quedaron cinco. Es una serie de espectáculos: en cada uno el superhéroe se enfrenta con un villano distinto, hasta que llega al último en el que tiene el encuentro con el villano mayor. Funciona como un videojuego, en el que se pasa de nivel. Los actores salen vestidos de animé y dispuestos a jugar", cuenta Maruja.
Otros referentes fueron sus hermanos. "Cuando eran chicos, mis hermanos veían Los caballeros del zodíaco, Sailor Moon, Pokemon. Me gustó mucho ese universo y sobre todo cruzarlo con algo autóctono, como por ejemplo qué pasa si los superhéroes toman mate".
Para resaltar la estética del videojuego las obras trabajan mucho con el registro audiovisual: hay proyecciones, flashbacks y se capturan imágenes en vivo. La aspiración de la directora –que escribió las obras junto a Gael Policano Rossi– es que la gente se entusiasme para ver los cinco espectáculos. No es necesario verlos a todos para entender la historia. Pero, cada obra cuenta con un programa de mano, a modo de historieta, en el que se cuenta lo que sucedió en los episodios anteriores.
La propuesta es para toda la familia. Cuenta Maruja: "Tengo interés de que la gente vaya al teatro, porque me siento que mucho no van. Creo que los adultos ya están viciados y hay que apuntar al público adolescente infantil. Es lo que me pasó a mí: cuando era chica iba mucho al teatro y eso me hizo muy bien”.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Andrea Gilmour

Susana Torres Molina: Estática

Chamé Buendia: Last Call-última llamada