Gotas que caen sobre rocas calientes

Un Fassbinder ingenuo y en tono de comedia

Cruce de elementos que no llegan a provocar

Personajes devastados que reclaman afecto pero se regodean con sus propios egoísmos. Seres marginales que encuentran en el sexo una posibilidad de encuentro y también de destrucción. Una sucesión de escenas que expone una relación homosexual, marcada por un dominador y un dominado, que acabará resultando un patético juego en el que, la ex amante del hombre mayor y la ex novia del joven, comenzarán a interferir para que nada de lo que sucedía entre ellos se convierta en una realidad palpable. Siempre algo puede desestabilizarse más y más. Y no es sólo una cuestión de desencuentros, sino de encuentros premeditados, agresivos, destructivos.

La pieza de Rainer Werner Fassbinder aparece en la puesta de Matías Marmorato como una comedia ligera, en la que una sucesión de aparentes equívocos van dando forma a un mundo que provoca risa por lo desgastado que está. La lectura podría ser posible si la opinión del director fuera contundente. Si construyera personajes lo suficientemente enteros como para que su mirada posibilitara una reflexión. Si cada una de las situaciones que esos personajes transitan encontraran en el drama esa razón que los motivara, realmente, a tener un desarrollo efectivo, coherente y provocador ante la platea.

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En Teatro Del Nudo (Corrientes 1551). Viernes y sábados a las 22.45.

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