La rotativa del Maipo

La revista dislocada

Ximena Capristo, Miranda! y Jorge Lanata, no interactúan sino que conviven en tiempos distintos en el escenario.

Esta nueva oferta teatral despierta, al menos, extrañamiento. El nombre que encabeza el cartel es el de Jorge Lanata, y el género del espectáculo, "revista". El Maipo cumple 100 años y en el marco de los festejos, ofrece un show diferente que se anuncia con demasiada pompa: La rotativa del Maipo.

Para Lanata, es su primera incursión en un escenario. Aunque a priori cuesta imaginarlo en esa situación, al verlo sobre tablas, no hay sorpresas. El tono de su discurso es el que usa en la radio o en la TV. No construye otro personaje más que el que construyó de sí mismo en los medios, crítico del oficialismo, irónico y con algunas contradicciones (dice que hay que ocuparse de los pobres, pero se queja de los "cuida coches"). Tal vez, con el tiempo, gane soltura y ajuste textos demasiado extensos. Pero no dejará de ser él mismo. A quien le guste, ahí lo tiene, en vivo (pero sin fumar). Cada noche, comenta la tapa del diario Crítica que saldrá al otro día y presenta un par de videos. "Cada día va a ser distinto", dice, aunque lo que sigue no es susceptible a actualizaciones: una larga perorata para hablar de la desnutrición, una desmitificación de creencias populares sobre inventos argentinos y la reivindicación de un héroe.

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