Conversaciones después de un entierro

Nota del 10 de octubre

Los hijos del rigor

Se estrenó otra obra de Yasmina Reza, con un elenco de reconocidas figuras del teatro y la televisión

Natalia Lobo practica un paso de baile y alarga sus brazos; Federico Olivera mira hacia el negro y solitario fondo de la sala y repasa sus líneas; Alejandro Awada se agacha hasta alcanzar la punta de sus pies como un deportista antes de oír el tiro de largada. Los tres actores se preparan para interpretar la obra de una de las más reconocidas dramaturgas del mundo: Yasmina Reza. Se preparan para Conversaciones después de un entierro .

El ensayo, que comenzó hace más de un mes y medio, los ha dejado listos para convertirse en los tres hermanos solos, vulnerables y desamparados que imaginó Reza en la obra que escribió con tan sólo 28 años y que le valió un temprano Molière, la más alta distinción otorgada a los dramaturgos franceses, en 1986. La mente oculta detrás de Conversaciones después de un entierro es la misma que ha logrado cosechar el éxito al ser traducida a 35 idiomas, representada en medio mundo, multipremiada y estudiada en la Sorbona a la par de Beckett. La escritora, actriz, novelista y dramaturga francesa que alguna vez se defendió de los críticos que la acusaban de frívola con la elegante respuesta: "La frivolidad es la espuma de la inteligencia", se ha convertido en la autora teatral de moda en el plano mundial.

Más en La Nación