Marcelo Katz, Leticia Torres, Violeta Naón y Walter Velázquez
Con las narices rojas Los payasos copan el teatro independiente y el oficial con por lo menos diez propuestas Importantes dosis de ternura, impulsos sin filtros, transparencia, cierta torpeza y enormes cuotas de un humor ingenuo y simple, de ese que no lastima. Tal vez allí puedan buscarse las bases del lúdico mundo del clown, donde el vínculo con el espectador se construye en cada función, en un espacio que se teje de ambos lados del escenario. Como una búsqueda inagotable de nuevas formas de decir, de miradas poco convencionales sobre los temas fundamentales de la humanidad, de intentos por bucear en aguas profundas, el humor sostiene a quienes eligen el lenguaje del clown como expresión artística y lo transforma en cosa seria. Cada vez son más las personas que se acercan a los talleres que dictan maestros y profesionales del género en la ciudad. Así, la cartelera porteña ofrece más de una decena de propuestas para público adulto que buscan conmover a la vez que arrancan sonoras carc...