Escuela Metropolitana de Arte Dramático (EMAD)


En lucha contra el vaciamiento cultural

Alumnos, docentes y no docentes del instituto superior de formación teatral sacaron las aulas a la calle e hicieron clases públicas en el patio del Teatro Colón. Durante todo el día hubo también distintas performances e intervenciones artísticas.

La de ayer no fue una jornada más para la comunidad educativa de la Escuela Metropolitana de Arte Dramático (EMAD). En lucha contra el vaciamiento de la institución, y declarados en estado de emergencia por una situación que ésta arrastra hace años, alumnos, docentes y no docentes del instituto superior de formación teatral sacaron las aulas a la calle e hicieron clases públicas en el patio del Teatro Colón. El objetivo era llamar la atención de quienes rodearan el coliseo porteño y también conseguir una reunión con el ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, Darío Lopérfido, ya que la escuela depende de la Dirección General de Enseñanza Artística (DGEart) que forma parte de su cartera. Lo último no sucedió, pero durante todo el día hubo distintas performances, intervenciones artísticas y dictado de clases teórico-prácticas de las cinco carreras de la institución.

Según denunciaron los presentes –que el pasado 4 de mayo ya habían marchado a la DGEart para manifestar su situación–, el problema es fundamentalmente presupuestario, ya que de los fondos totales del ministerio, únicamente el 4 por ciento es destinado a esa dependencia, que además de la EMAD maneja el Instituto de Investigación de Etnomusicología, el Conservatorio Superior de Música Astor Piazolla, el Instituto Vocacional de Arte Manuel José Labardén y el Conservatorio Superior de Música Manuel de Falla, cuyos alumnos la semana pasada también denunciaban vaciamiento. Al tener varias sedes cada una, lo destinado a cada institución no llega a cubrir los gastos de infraestructura ni los sueldos docentes, uno de los mayores reclamos de quienes ayer se concentraron en la calle Tucumán.

El problema es fundamentalmente presupuestario pero acarrea otros, según contó a este diario Andrés Molina, artista y docente de la institución, que ayer acompañó el reclamo: “No contamos con personal suficiente para mantener abiertas todas las sedes, ni con personal escenotécnico necesario para auxiliar en las clases. Muchos de los docentes además no estamos cobrando y no hay trabajadores administrativos suficientes para la designación de horas cátedra. Además, las aulas y salas de ensayo son insuficientes para el uso necesario y no contamos con presupuesto para los proyectos de graduación obligatorios, entre muchas otras cosas”, especificó el docente, que recalcó que el reclamo también es de ellos, y no únicamente del alumnado, como pretende instalar la DGEArt.

“Decidimos cambiar el lugar de nuestra actividad diaria a modo de reclamo. Los problemas son históricos, no es algo nuevo. En este momento la situación es de abandono total. Nadie nos responde y las distintas sedes ya directamente son peligrosas. En una se filtra agua por los techos, en otras no hay agua. Si la Ciudad pusiera las mismas condiciones que exige a los centros culturales para habilitarlos, a nosotros nos clausurarían”, cuenta Manon Lavayén, del centro de estudiantes de la escuela, que es pública y gratuita.

Las actividades de la jornada se extendieron durante todo el día. La comunidad educativa recién desconcentró pasadas las 20, con la promesa de volver cuantas veces sean necesarias. “Vamos a seguir con el reclamo, pero haciendo clases y no paros, porque no queremos contribuir al vaciamiento que quieren hacer las autoridades. A este ritmo, la EMAD tendría que cerrar por las condiciones en las que está, y por la situación de los docentes. Nosotros queremos que viva, así que nos manifestamos pacíficamente mientras hacemos lo que tenemos que hacer, que es estudiar y formarnos en el quehacer teatral”, cerró Christian Chen Serra, también representante del órgano gremial estudiantil.

Fuente: Página/12

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