Héctor Presa

El trabajo en equipo y un creador global de teatro

Cómo imaginar sin límites, con compromiso y fusión de herramientas, un mundo para niños.

En los inicios de mi carrera allá por el año 1978, cuando creamos con Dora Sterman el Grupo La Galera, sosteníamos que uno de los pilares sobre los cuales queríamos basar nuestra tarea era el de trabajar en equipo, con gente especializada en cada área creativa. Yo venía de la actuación y muy primitivamente empezaba a dirigir pero mi experiencia en dramatrurgia era casi nula. Empecé entonces, advirtiendo la carencia de autores teatrales infantiles (problema que persiste hoy en día). Comencé, decía, por necesidad y no por vocación, a escribir.
Las historias eran simples y la poética más simple aún, por lo que tuve la necesidad de formarme en el campo de la escritura. Alberto Mediza fue mi maestro en ese rubro y entre sus conceptos claros, precisos y los de Rubens Correa, maravilloso docente que marcó mi estilo de trabajo en el terreno de la actuación, empecé a vincularme con las obras de una manera global. A esto se sumaban mis cuatro años en Arquitectura,  que le daban al concepto escenográfico un criterio particular. Esta es una particularidad que aún hoy conservo. La necesidad casi simultánea con la escritura de visualizar el espacio escénico. De resolver rápidamente la línea estética de la obra. Por otro lado, la música ha sido y será uno de los pilares de mi trabajo. Sin ser músico (apenas un cantante frustrado) mi vínculo con la música también fue siempre muy cercano y al trabajar con músicos de la talla de Miguel Rur, Ángel Mahler, Martín Bianchedi, Carlos Gianni, Diego Lozano, Rony Keselman, el concepto musical se fue ampliando, fue creciendo, fue formando parte invalorable de cada una de nuestras producciones. Hasta tuve el lujo de que el gran Astor Piazzolla nos cediera su música allá por el año 1980 para un espectáculo sobre la Ciudad de Buenos Aires.
Los años pasaron y el presente, con más de 150 espectáculos estrenados, me encuentra con una metodología particular de trabajo que aúna áreas, que las involucra, que hace que interactúen constantemente y que al vincularse con los actores y demás creativos, músicos, coreografos, escenógrafos, vestuaristas, plantea un estilo definido, que ha caracterizado a La Galera a través de los años.
Todo forma parte de un todo. El proceso creativo en mi caso nace habitualmente con una anécdota que quiero abordar. Empiezo a desarrollar una idea e inmediatamente necesito el espacio donde se ubicará, por lo que no puede tardar en aparecer el concepto estético que acompañará la producción y empieza a resonar en mi cabeza el estilo de las melodías que acompañarán cada momento. A partir de ese instante mi cabeza se invade por distintas sensaciones que van mutando a medida que los ensayos avanzan.
En el caso de los espectáculos para chicos, me resulta indispensable saber qué objetos aparecerán en escena para inmediatamente tomar conocimiento de las posibilidades de juego de cada elemento de la utilería o escenografía. Así fue como fueron protagonistas de obras, cubos, artículos de limpieza, paraguas, objetos antiguos, gorras, sombreros, relojes.
Como los roles se superponen (soy autor, director y muchas veces actor) estoy muy acostumbrado a que los textos que escribo sean dinámicos. Que las estructuras planteadas sean fijas hasta ser probadas y luego puedan someterse a los más diametrales enfoques.
Cuanto más sueltos, creativos, talentosos sean los actores con los que trabajo, más modificaciones tienen los textos que originalmente escribo y eso es un factor que me apasiona del trabajo. Ver cómo todo va tomando nuevos rumbos. Cómo los ensayos me plantean nuevos interrogantes a cada momento, que hacen que mi tarea se enriquezca.
No creo en ningún tipo de limitaciones en la etapa de elaboración. Considero que es trabajo del actor saber analizar lo que el texto le propone y, a partir de ahí, elaborar una propuesta que llevar al ensayo. De la misma forma opino de las demás áreas creativas: leemos, analizamos, elaboramos, proponemos, modificamos, volvemos a modificar, volvemos a proponer.
A partir de todas y cada una de las áreas que conforman el espectáculo y de la propuesta que cada una de ellas trae, yo siento la necesidad de reformular el camino. Voy transitando un proceso dinámico que hace que nada esté definido hasta muy avanzados los ensayos. Todo en nuestros procesos es maleable, trasformable, recreable. Cada ensayo me da la oportunidad de  reconstruir lo ya construido, de desarmarlo para volver a armarlo de una manera distinta, hasta llegar a esa grata sensación de seguridad.
Astor Piazzolla me dijo que él consideraba que su música no era para chicos. Luego de ver un trabajo que le presentamos para que lo evaluara y decidiera si podíamos usar su música, soltó una frase que atesoro ... "Si me hubieras pedido que componga música para chicos, hubiese simplificado las armonías.... viendo lo que acabo de ver, reconozco mi error... mi música puede ser escuchada por un niño... Es más, me animaría a decir por carácter transitivo que cualquier música puede ser escuchada por un niño." Un grande con capacidad de reconocer lo poco que en definitiva sabemos acerca de todo.
Un proceso continuo. Un camino por descubrir, rodeado de capaces, de inquietos, de trabajadores, de obsesivos. En fin, rodeado de un equipo de trabajo que haga que el proceso de creación de una obra se viva como lo que realmente debe ser.
Un lugar donde desnudarse, donde quedarse en carne viva, donde admitir lo poco que sabemos para poder crecer, donde disfrutar de lo que los otros pueden aportarnos y de ver a cada instante crecer nuestro trabajo hasta considerar que ya está listo para ser presentado ante el público.
Y a partir de ahí se inicia un nuevo proceso.... maravilloso como el anterior que da para otra charla, para otra reflexión.  «

Héctor Presa es fundador del grupo de teatro para chicos La Galera Encantada y del teatro La Galera, donde se presenta una variedad de espectáculos infantiles. Con el grupo recibió desde su formación, en 1978. más de 130 premios. El año pasado fue nombrado personalidad destacada de la cultura. En la actualidad dirige el espectáculo para adultos Oxímoron, en la oscuridad las cosas se ven claras en el Teatro Larreta.

Fuente: Tiempo Argentino