Carlos Rottemberg, Lino Patalano, Dos pícaros sinvergüenzas, Escenas de la vida conyugal, Fátima para todos, Toc Toc, Big Bang Bossi, Leonas y La Nona

Un verano a salas llenas

Este año arrancó con un récord de cantidad de público en las obras presentadas en Mar del Plata, dato que entusiasma a los productores. Las cifras y las claves para sostener el fenómeno.

El documento de Excel con los resultados de la temporada de verano 2015 dejó resultados muy positivos para los productores teatrales. Aunque todavía no terminaron de cerrar las cifras, Carlos Rottemberg (presidente de AADET, la asociación que reúne a los dueños de las salas comerciales) aseguró que esta temporada aumentó un 50 por ciento la cantidad de público en las salas marplatenses. Este crecimiento tan grande responde a varios factores, que van desde el tipo de propuestas artísticas que se presentaron en la ciudad hasta los cambios que se dieron en el turismo. En Buenos Aires, se registró entre un 15 y 20 por ciento menos de espectadores. La baja también se explica por las mismas razones.
"Fuimos con tanques", dice Lino Patalano, dueño del Teatro Maipo y productor de la obra Escenas de la vida conyugal, interpretada por Érica Rivas y Ricardo Darín, espectáculo que salió segundo en el ranking de recaudación de obras de teatro, que elabora AADET. El primero fue Dos pícaros sinvergüenzas, el auténtico misil que se presentó en Mar del Plata, con las actuaciones de Adrián Suar y Guillermo Francella, y que arrasó en la taquilla, con doble-funciones y a sala llena, siempre.
El tercer puesto de mayor venta de entradas fue el espectáculo de Fátima Florez, Fátima para todos, y cuarto, Toc Toc (la obra que ya lleva cinco años en cartel y pareciera no agotarse). El quinto puesto varió según la presencia o no de Martín Bossi y su show Big Bang Bossi. El actor alternó sus presentaciones entre Buenos Aires y Mar del Plata. Si él estaba en la ciudad balnearia quedaba en el quinto puesto; si no, ascendía Leonas, la comedia que protagonizaron Nazarena Vélez y Carmen Barbieri. Stravaganza, el show que fusiona circo, acrobacia y música, no se encuentra en este listado ya que no forma parte de AADET porque se inscribe en el rubro variedades y no como espectáculo teatral. De todos modos, ese show fue uno de los tanques a los que se refiere Patalano, y que se representó en el estadio Polideportivo de Mar del Plata con entradas agotadas.
Otra obra que tuvo buenos resultados de público fue La Nona, el clásico de Tito Cossa, protagonizado por Pepe Soriano y acompañado por un gran elenco de actores, que incluyó a Hugo Arana, Gino Renni y Mónica Villa. La Nona fue la primera obra que abrió la temporada y la última en terminar. "Es una buena señal para una ciudad como Mar del Plata, porque tuvo un elenco de pura cepa teatral y con un público que busca la excelencia artística, no la difusión desesperada por mostrar quién sale primero. Creo que los que vieron la obra se rieron mucho más que el público que eligió algunos espectáculos que, a priori, son pura risa. Es importante saber de qué nos reímos. Fabricar contenidos no es lo mismo que fabricar chapitas. La risa es siempre la misma, pero qué provoca la risa es otra cuestión", dice Rottemberg a Tiempo. De hecho, a fines de marzo La Nona arranca su temporada en Buenos Aires, en el Multiteatro.
"Fue muy bueno el crecimiento que tuvimos este verano, pero hay que tener en cuenta que el 2014 fue un verano flojo. Entonces, hay que tener como referencia ese piso. Creo que Mar del Plata mostró sus joyas y la gente las valoró. El Museo del Mar fue un gran aporte. En el caso de los productores, tuvimos la suerte de coincidir con el gusto del público. Algo que a veces está ligado al azar y la intuición. Yo creo que este verano una buena revista de verdad podría haber reventado un teatro. Pero no hubo ninguna", reflexiona Patalano.

ANTECEDENTES. Hay una cifra contundente en la historia de los veranos teatrales que es el marco de referencia de los productores. Fue en 1987, cuando la temporada teatral en Mar del Plata rompió todos los records posibles: en ese momento Alberto Olmedo estaba en el teatro y, en total, se vendieron 760 mil entradas. Nunca más se llegó a tal cifra de espectadores. Según las estadísticas de AADET, el peor momento de convocatoria de público sucedió en la crisis de 2001 y 2002, cuando sólo se registraron 200 mil entradas vendidas en todo el verano. Luego de esa baja exponencial, se empezó a crecer de a poco, hasta que en 2010 se llegaron a vender 500 mil entradas. Luego, otra vez, las estadísticas volvieron a descender, aunque con números que no alarmaban a los inversionistas. La preocupación sí estuvo en 2013 y 2014, que fueron los peores años vinculados a ese descenso. Hasta hubo espectáculos que se bajaron en medio de la temporada por falta de público. Ahora, en 2015, se notó un nuevo alza.
"Lo que pasó en 2015 es que se logró una recuperación, que en algún momento tenía que suceder y se iba a pegar la vuelta para arriba. Estas cuestiones son cíclicas. Creo que vamos a llegar a las cifras que alcanzamos en 2011 en cuanto a venta de entradas, aunque todavía no tenemos los números finales", explica Rottemberg.
Los motivos de este crecimiento son múltiples: por un lado, sucede lo que planteó Lino Patalano acerca de las propuestas artísticas que fueron muy atractivas para el público. Pero además, hubo cambios en el turismo. En síntesis, mucha gente eligió veranear en las costas argentinas, mientras que el verano de 2014 había sido récord de temporadas de cruceros, con paquetes que incluían viajes por las costas uruguayas y brasileñas. "También hubo mucho turismo nacional y no fue tan espasmódico. La gente se quedó más tiempo en los destinos", aclara Rottemberg.
Además, en Mar del Plata confluyeron algunos jugadores que no son habituales: Darín, Adrián Suar, Guillermo Francella y un estadio entero para representar Stravaganza. "Nunca llenamos teatros con escándalos mediáticos. Lo que sí vale es conseguir una propuesta atractiva en contenidos y en figuras", cuenta el productor.
"Pudimos volver a convocar al público, más allá de las falsas promesas de los dirigentes que, de todos modos, nos metieron 400 cosas gratuitas por día, cuando se sabe que eso afecta la actividad teatral. No estoy en contra de los shows gratuitos, pero sí con que se haga todo junto en enero y febrero, que son los meses fuertes para nosotros. Los costos fijos son muy duros para los productores. Antes, con un éxito, podíamos mantener un fracaso durante un año. Ahora necesitamos cinco éxitos para poder mantener un fracaso. El margen de ganancias es muy inferior. Antes, al productor le quedaba entre un 20 y un 25 por ciento de ganancias; ahora, si nos queda un 15 por ciento, es un milagro", agrega Patalano.
Para los responsables de elegir el contenido y las inversiones que se hacen en las salas comerciales argentinas no están todas las cartas echadas. Ahora, arrancan sus propuestas artísticas para sostener la convocatoria durante todo 2015. De a poco, las fórmulas clásicas comienzan a dejar paso a algunos riesgos tímidos que empiezan a aparecer. Las cifras ayudan a que se animen un poco más a la experimentación.


Taquilla en cifras

50% es el aumento de venta de entradas durante la temprada de verano 2015 con relación al año anterior.
260 pesos es el precio promedio de las entradas del teatro comercial. Las más caras llegan a los 700 pesos y las más baratas a 180.
760 mil entradas fue el récord de convocatoria de público en Mar del Plata, cuando Alberto Olmedo hacía temporada.
2001/2002 fueron los peores años de venta de entradas, con 200 mil tickets vendidos en todo el verano en Mar del Plata.
500 mil entradas vendidas en el verano fue el nuevo record de la recuperación económica, en 2010.
70 mil espectadores es la cifra que convierte a un espectáculo en un éxito de convocatoria, según los productores, durante 11 meses de funciones.

Fuente: Tiempo Argentino