5º Festival Nacional de Teatro de Humor


Nota del 23 de abril

Espacio de creación y resistencia

A partir de hoy y hasta el domingo, el encuentro, que incluye la entrega del Premio Emilia a las obras ganadoras, propone convocar desde la Patagonia a la difusión y reflexión sobre dramaturgia cómica argentina y contemporánea.

Un dramaturgo de trayectoria recordó que Hugo Luis Saccoccia fue mago en su juventud y otro lo mencionó repetidas veces en sus notas periodísticas admirando su capacidad para clasificar la marea de textos teatrales que circulan por el país y lograr que la neuquina Zapala fuera centro de una biblioteca, refugio de dramaturgos y hoy ciudad-faro de festivales de teatro, concursos y congresos nacionales de dramaturgia. En esa sede que abrazó a otras ciudades con artistas dispuestos a dar a conocer sus trabajos se realiza a partir de hoy y hasta el domingo el 5º Festival Nacional de Tea-tro de Humor, que incluye la entrega del Premio Emilia (en homenaje a Emilia Valeri) a las obras ganadoras por concurso.

El radio de acción comprende Bariloche, San Martín de los Andes y Junín de los Andes, Villa Regina, General Roca, Cipolletti, Neuquén, Plaza Huincul y Cutral-Có. Orgulloso de anunciar que “un Festival de teatro de humor no es joda”, Saccoccia recuerda que éste fue un proyecto nacido diez años atrás como uno más de los muchos que se planteó junto a sus colaboradores de la Biblioteca Hueney, organizadora del evento. Ese proyecto era evaluar nuevos textos, convocar a jurados reconocidos por sus obras a nivel internacional y lograr además que los trabajos fueran publicados. Tanto empuje tuvo su recompensa. Saccoccia obtuvo el aval del Instituto Nacional del Teatro, de Argentores y, en los últimos tiempos, el respaldo económico de la Comisión del Grupo Teatral Hueney, la ONG de la Biblioteca que fundó. A esto suma el auspicio de instituciones y empresas privadas que han hecho posible la publicación de una revista. Un triunfo más en “la lucha por un sueño en el que creemos –como dice este autor y editor–, sin otro combustible que el entusiasmo y la perseverancia y sin otra ambición que consolidar un espacio cada vez más confiable de creación y difusión de nuestros dramaturgos y de participación y producción para nuestros teatristas”.

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