Juan Rodó


"La confianza en uno se da con esfuerzo"

–¿Qué te enorgullece de tu actividad?
–Que mi actividad nunca se termina y ahí está metida la música. Es como un árbol con picos que nunca se agotan. Es búsqueda y placer sin fin. Siempre hay algo por encontrar, siempre. Es uno de los pocos trabajos que tiene esa particularidad. Yo lo hago y siempre me sentí dichoso por eso.
–¿Qué es lo que menos te gusta de tu actividad?
–Las renuncias que uno debe hacer. Trato que los demás comprendan  que como artista uno no trata de postergar las cosas así nomás. A veces se hace difícil explicarles a las personas que querés por qué hacés ciertas cosas. Pero mi trabajo tiene esas situaciones, y la realidad es que uno no puede estar en todos lados ni multiplicarse.
–¿Cuál es el sentido de la vida?
–Cumplir la misión en la vida que cada uno tiene. Dejar una huella en el tiempo que tenemos, el tiempo que nos dieron como dado y no debemos desaprovechar. Se deben fijar cosas buenas y ejemplos de vida que le sirva a todos o a la inmensa mayoría de la gente. Justamente, hay que tratar e intentar ser un instrumento de la mayoría, vivir en armonía con los demás. Ese para mí es el sentido de la vida.
–¿Qué obra o artista te cambió la vida?
–Soy un artista al que Sherrill Milnes lo signó. Es un barítono que me marcó como cantante, al que conocí, pude saludarlo y decirle cuánto lo admiro. Seguramente habré sido uno de los tantos a los que saludó en su vida pero yo todavía recuerdo ese momento. Es que su sonido es increíble porque él es un chelo. Es un gran cantante con una belleza de terciopelo.
–¿El éxito da más libertad artística o todo lo contrario?
–Sí, te da posibilidad de elegir pero uno está más expuesto. Yo no trabajo por la crítica positiva o negativa. Simplemente trabajo porque me gusta lo que hago, y si después a la crítica le gusta o no, esa es otra cosa, otra instancia de la que no me ocupo.
–¿Cómo concibe el éxito Juan Rodó?
–Los logros que uno consigue son gratificantes por más que vayan 1000 o 20 personas a verte. Mi objetivo no es el éxito que se da por la convocatoria sino por la posibilidad de dar a conocer lo que se hace con tanto esfuerzo. Poder hacerlo me da una satisfacción inmediata que nada tiene que ver con el éxito formal o en términos de suceso mediático.
–¿Qué enseñanza te dejaron tantos años de profesión?
–La confianza en uno mismo se logra con esfuerzo. Se van a buscar las oportunidades y se las consigue después de ir e ir. Por otro lado, hay que estar rodeado siempre de buena gente.
–¿Qué cosas te indignan de la sociedad en la que vivimos?
–La hipocresía, la negación, la mentira, la desprotección. Son cosas que siempre estuvieron pero que no dejan de lastimarme.
–¿Cuán importante es el dinero en la sociedad en la que vivimos? ¿Y para vos?
–Para mí es un medio para vivir y nada más. No soy una persona que ande pensando en el dinero todo el día. Por eso, para mí es sólo un medio de subsistencia y nada más, y hasta te diría que no me importa. No ahorro, no me interesa atesorar ni nada parecido porque lo importante lo encuentro en otras cosas, en otras relaciones. Diría que vivo al día.
–¿Qué cosas de tu profesión no se negocian?
–Abandonar mi carrera, no podría dejarla, ni siquiera imaginarlo. Más allá de ser mi trabajo, es mi pasión. Hice algunas concesiones en mi vida pero jamás con una carrera que me hace feliz desde hace tanto tiempo. No podría ni imaginarme abandonar lo que tanto quiero y desde hace tanto hago.


Juan Rodó, uno de los hombres más representativos de la comedia musical en Argentina, acaba de fundar la compañía teatral Nuevos Ayres Musicales. El objetivo será promover la realización de comedias musicales de culto que nunca fueron  realizadas en Argentina. El primer musical con el que debutará la compañía es Phantom, de Maury Yeston y Arthur Kopit, con estreno previsto para el 8 de agosto en Teatro del Globo (Marcelo T. de Alvear 1155). Funciones los viernes y sábados.

Fuente: Tiempo Argentino

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