Soledad Silveyra: Nada del amor me produce envidia y Humores que matan


Soledad Silveyra viaja del drama a la comedia mientras recorre dos obras diferentes

La actriz compone dos personajes muy diferentes entre sí ya que mientras encarna a una costurera de barrio capaz de confeccionar un vestido disputado por Libertad Lamarque y Eva Perón en la pieza "Nada del amor me produce envidia" en el Maipo, deviene una psiquiatra autoritaria en "Humores que matan", una comedia con la que está en gira por el país.

"Vamos Sole, hacemos el comienzo y después pasamos a otra escena", insta cariñosamente Alejandro Tantanian, el director de "Nada del amor me produce envidia", la bella pieza de Santiago Loza, mientras la protagonista del texto susurra conmovida, "es difícil hacerlo sin las luces".

Este diálogo entre el director y la actriz, única presencia sobre el escenario del Maipo para componer a la vulnerable costurera oficia de bosquejo que delata la emoción, los hilos de la sensibilidad de la actriz que pueden atisbarse gracias a la composición del complejo personaje.

"Pasar de `Humores... a `Nada del amor..` es algo loquísimo. Son dos universos totalmente diferentes. La verdad es que todo este período creativo de ensayos -unos 30 en varias semanas- fue devastador", confiesa Silveyra en charla con Télam, mientras conserva las manos cruzadas sobre su regazo en un gesto humilde, propio de la criatura de Loza.

No debe ser resultar fácil sacarse de encima a este personaje, ya que "requiere de mucha espiritualidad y concentración. Es una mujer  frágil que se enfrenta a un decisión muy difícil", detalla Solita con los ojos brillosos.

"Nada del amor me produce envidia" cuenta la historia de una costurera que por azar confecciona un vestido que seduce a Libertad Lamarque y a Eva Perón, una disputa por un vestido y un amor, como símbolos de un país atravesado por dos miradas distintas.

Y mientras esta criatura cose y descose una prenda, aparece el relato de un ser herido, dotado de la voz de los que sólo tienen permiso para hacer silencio, aunque la actriz afirma que, "el monólogo toma ahora una dimensión más fuerte porque plantea qué pasa si antepongo el yo, más allá de hablar sobre la soledad y el poder".

El presente laboral de Solita la encuentra realizando este unipersonal los lunes en el Maipo, al mismo tiempo que encabeza una gira con la comedia "Humores que matan" de Woody Allen, junto a María Valenzuela.

En relación a las exigencias laborales. la dama puntualiza, "el otro día mientras veía una de esas pelis que nos pasan en el motor home, pesqué `Word Horse`, de Spielberg, y me dije, `Silveyra estás como ese caballo del filme, tirando y tirando".

La actriz descarta un ofrecimiento para participar del programa "Celebrity Splash" (Telefé) y al respecto ironiza, "si a esta altura de la carrera lo único que pueden ofrecerte es algo así, dan ganas de llorar, encima pagaban mucho dinero y yo ni sé nadar".

"Nada del amor me produce envidia" puede verse los lunes a las 20.30 en el Maipo, Esmeralda 443, pero desde el lunes 15 al miércoles 17 de julio, la obra recorrerá las tablas del teatro Solís de Montevideo.

Feliz con este viaje, Solita destaca que, "de paso aprovecharé para visitar a mi amiga China Zorrilla, con quien hablo por teléfono todos los días y cuando la escucho me sigue sorprendiendo su voz, su tono cristalino, como si fuera una adolescente".

"Humores que matan", la comedia dirigida por Luis Romero le permite a Solita calzarse el traje de una psiquiatra capaz de asfixiar a su marido y reflexionar con humor sobre los endebles lazos que unen hasta a las más sólida de las parejas.

De todos modos, la actriz marca las diferencias que existen entre su personalidad y la del personaje de "Humores…”, quien "tiene un ego enorme que la deja aislada de la realidad y no le permite ver ni lo que sucede con su marido".

A la hora de las autodefiniciones esta mujer que explora diferentes modos del amor en ambas obras afirma, "soy una enferma de la verdad, por eso el amor me resulta arduo".

Fuente: Télam

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