Propios-sonografías de un nombre



Propios: cuerpos en los que resuena la tragedia musical del vivir

Nueve cuerpos capaces de resonar para presentarse, abordar la existencia, cuestionarse y repasar amores y dolores, asumen la intensidad de “Propios-sonografías de un nombre”, obra vocal ideada y dirigida por Jessica Pinkus .

Estos dos trovadores modernos e inspirados, a los que separa el Atlántico pero reúne el talento y una desolación inconforme que se traduce en belleza, fueron elegidos por Pinkus para guiar las certezas y las dudas que afloran sobre el escenario de la sala Batato Barea del porteño y universitario Centro Cultural Rojas.

La audaz idea de quien es maestra de canto y psicoanalista, se despliega (y se apiña y se retrae y se desliza y estalla) sobre un tablado despojado, de paneles blancos y luminarias casi siempre quietas y claras que recibe a seis mujeres y tres hombres de atuendos negros y unas voces afinadas e impactantes.

Pero además de las privilegiadas gargantas puestas al servicio del canto, el elenco apela a ruidos, gestos, acciones y palabras que complementan el impactante ejercicio de ponerle el cuerpo a una serie de canciones interpretadas a capella.

 De frente a la platea, cada uno de los artistas se presenta apelando a su nombre, a un apodo, o a una denominación más completa que incluye el apellido y esas enunciaciones personales disparan pequeñas y desgarradas historias personales donde la preocupación individual parece anular toda otra inquietud colectiva o societaria.

De hecho, cuando alguien cuenta su pesar, su duda o su dicha,  el resto gime, se agita, se traslada o, en la mayoría de los casos, inicia un canto que luego se generaliza en un juego bello que no alcanza el rango de proclama grupal.

Juntos pero solos, multiplicados pero en estado de abandono, esos seres con nombre se atreven a narrar historias que, aunque se trate de fragmentos, consiguen corporizar y disfrutar las canciones de Ferro y López  desde una hermosura no exenta de pesares.

La sucesión de 13 breves e intensos actos se asoma a media docena de fragmentos de canciones de Gabo Ferro, ofrece cinco obras de Xoel López e incluye dos piezas de integrantes de “Propios” (Lola García Garrido aporta “Bicho raro” y Nadia Villanueva “Un hermoso río”).

El recorrido se pone en marcha con “Engranaje” al que Ferro ilustra con “Soy todo lo que recuerdo”, Xoel inspira “Me dijeron” con “La boca del volcán” y Gabo el “Trueno” a partir de “Nube y cielo” y  “Puño cervical” desde “Agua blanca, pato negro”.

A la hora de “Intermitencia” se canta “Asaltante de estaciones”, de López-García Garrido, “Tu lengua” recurre a “Beso al beso”, de Gabo (“un régimen se descubre/cuando golpea estos besos/cuando golpea estas palabras/cuando golpea estos cuerpos”) y el trovador argentino también encausa “Arbol” con “Volví al jardín”.

El gallego López acerca a “La playa” con “Tierra” y el porteño Gabo anuncia “Voy a negar el mar”, antes de un cierre, con “El círculo” y “Propios”, que Xoel impulsa con los magníficos “Ver en la oscuridad” (“Morir es aprender a esperar/y vivir, vivir es aprender a ver en la oscuridad”) y “Quemas” (“Con todo lo que tú eras/Con todas tus cositas buenas/Por qué haces tanto daño/Y quemas, quemas, quemas”).

“Propios-sonografías de un nombre”, generada por la Compañía escénico vocal El Pulso que comanda Pinkus, es asumida por Karen Dunker, Ramón Ferreri, Lola García Garrido, Marianela Linsalata, María Luz Morcillo, Analía Panigutti, Emilio Pappolla, Gabriel Sánchez y Nadia Villanueva y se ofrece los jueves de mayo a las 21 en el complejo sito en Corrientes 2038.

Fuente: Télam

Comentarios

Entradas populares de este blog

Andrea Gilmour

Susana Torres Molina: Estática

Chamé Buendia: Last Call-última llamada